Lanzan primer espumoso elaborado en la región de Aysén
Después de varios años de investigación en la comuna de Chile Chico, en Aysén, el centro regional INIA Tamel Aike presentó un nuevo vino espumoso. Bajo el nombre de Keóken, el espumante está elaborado con las cepas Pinot Noir y Chardonnay.
«Estamos haciendo el lanzamiento del vino espumoso más austral del mundo. Keóken es un vino espumoso que ha sido elaborado y producido por INIA en Chile Chico, donde nos han mostrado su modelo productivo. Eso es lo que nos interesa como ministerio, diversificar y avanzar hacia run nuevo rubro productivo en esta región y en esta bella provincia», informó el Seremi de Agricultura, Alan Espinoza Ortiz.
El trabajo del Ministerio de Agricultura en la región de Aysén busca fortalecer la fruticultura y vitivinicultura, en el marco de las acciones de diversificación productiva local. La iniciativa partió tras el lanzamiento en 2017 del primer vino Keóken, gracias a las favorables condiciones que otorga el microclima del lugar para el cultivo de vides y otros frutales.
Este arduo trabajo en terreno permitió la definición de cepas y manejo de cultivos por parte del Equipo de INIA Chile Chico liderado por el investigador Diego Arribillaga.
Enoturismo al alza
Aparte de diversificar la oferta productiva, los resultados de esta investigación crean una opción en materia de enoturismo. Así lo resaltó el alcalde Luperciano Muñoz González al señalar que «dentro del perfil de desarrollo turístico que tenemos, todo lo que esté asociado a ello, nos da identidad y eso es sumamente relevante. Lo hemos destacado también, pero además hay que ir paso a paso. Lo importante es que todo esto nos lleve a que efectivamente el Chile Chico pueda generar un vino importante».
La importancia de producir vinos en la Patagonia de Aysén fue la mirada desde INIA Tamel Aike. Desde ese organismo destacan el interés por apuntar hacia la calidad, para lo cual se trabajó en análisis fisiológicos, identificación de plagas, manejo de follaje y el uso eficiente del agua. De esta forma se dio origen a una forma de generar un protocolo agronómico que sirva a los productores/as interesados en participar.
«Hace más de siete años se establecieron los primeros viñedos, lo que permitió elaborar el vino más austral del mundo», indicó la directora del INIA Tamel Aike, Camila Reyes. La profesional detalló las ventajas de vino espumante, como que «se cosecha previo al punto de maduración de la uva, por lo tanto, se evitan algunos riesgos de helada, por ejemplo. Entonces, hoy día ya no solamente contamos con un tipo de producto, sino que podemos ampliar la gama que está disponible».
Algunos de los avances tecnológicos incorporados en el viñedo son el sistema de riego por goteo, control de heladas, mulch plástico y cubierta protectora para prevenir daño de aves. Todo ello permitió generar un conocimiento práctico que será trasmitido a los productores locales.
Cabe agregar que desde el comienzo del proyecto del INIA en la cuenca del lago General Carrera, se han realizado tres vinificaciones. Con esa experiencia se ha concluido que algunas variedades presentan un mejor potencial para la producción de vino. Entre ellas destacan la Pinot Noir, Chardonnay y Sauvignon Blanc, mientras que otras -como la Riesling- están en evaluación para medir su potencialidad para elaborar espumante.
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