Cómo reconocer un buen chocolate
Chile es el segundo mayor consumidor de chocolate en Latinoamérica, con 2,5 kilos per cápita. Sólo es superado por Argentina, que tiene un promedio anual de consumo de 3 kilos por habitante y lejos de los europeos que comen unos 9 kilos al año.
Su consumo es una tendencia al alza. Esto, porque los paladares chilenos se han vuelto cada vez más exigentes, lo que ha generado el surgimiento de varias chocolaterías gourmet. Una de ellas es Cakao, el origen del chocolate, que cuenta con variedades de Perú, Ecuador, Africa, Vietnam y Oceanía.
Es importante saber que el chocolate —como el vino— adquiere sus características del terroir y está determinado por la altura, las formas de cultivo, clima que le dan más o menos intensidad y aroma.
“El chocolate tiene varios beneficios: es antioxidante, saludable, energético y placentero. Lo importante es que sea un buen producto y para eso hay formas de distinguir la calidad”, señala Jaime Díaz, socio fundador de Cakao.
Cómo reconocer un buen chocolate
Cada chocolate es el resultado de varios factores e ingredientes: el origen, el tipo de cacao utilizado, la altura y hasta la forma de cultivo. Pero, ¿cómo podemos reconocer un chocolate de buena calidad?
Según Jaime Díaz: “el origen del chocolate; la forma más fácil e infalible es apoyarse en los cinco sentidos, para un chocolate templado”.
Oído: al partirlo tiene que sonar. Un crack perfecto.
Vista: debe tener buen brillo, lustroso, uniforme, sin burbujas o hendiduras.
Color uniforme ya sea bitter, leche o blanco.
Olfato: excelente aroma. Olor a chocolate, no rancio.
Tacto: debe ser firme, nunca pegajoso. Al partirlo debe ofrecer poca resistencia y no debe astillarse. En boca debe ser suave, cremoso, que se derrita fácilmente sin rastro de granulosidades.
Gusto: se podrán encontrar toques de vainilla, frutos rojos, plátano, canela. Así se siente la acidez, el amargor y el dulzor en los distintos tipos de chocolate.