¿Sabías que el gusto se altera en la altitud?
Según variados estudios, el sabor de la sal y del azúcar puede llegar a disminuir un 30% con la altura. Al despegar el avión, se produce un cambio en la presión de aire y -a medida que el avión toma altura- se adormecen hasta un tercio las papilas gustativas.
Por lo mismo, es un desafío para las aerolíneas contar con menús adaptados que ayuden a los pasajeros a disfrutar del vuelo. Por ejemplo, la aerolínea australiana Qantas realizó ajustes en su oferta de comida y bebidas para enfrentar esta situación. Este año introdujo un nuevo menú en sus vuelos de Perth a Londres para aumentar la hidratación y combatir el jetlag.
Asimismo, reveló las preferencias gastronómicas de sus usuarios. Entre ellas, destacan los sándwiches de salchicha, shots de probióticos, el sándwich “Steak”, el “Blue Eye Trevalla” con arroz frito y ajo, gambas con curry y el “Massaman Beef Curry”.
Además, los más de 30 millones de clientes consumieron 130.000 botellas de champagne, siendo, nuevamente, la bebida preferida.