Chile celebra 30 años del redescubrimiento del Carmenere
Este año marca el 30 aniversario del redescubrimiento del Carmenere en Chile, un acontecimiento que transformó la industria del vino a nivel mundial. El 24 de noviembre de 1994, el ampelógrafo francés Jean-Michel Boursiquot visitó la viña Carmen y descubrió que lo que se creía Merlot tardío era en realidad Carmenere. Una variedad que se pensaba extinta desde la plaga de la filoxera que azotó Europa durante el siglo XIX.
“El redescubrimiento del Carmenere fue una oportunidad para que la industria del vino chileno se uniera, se revitalizara y destacara con una propuesta innovadora. Me enorgullece ver que mi contribución fue útil, aunque sé que fui solo un eslabón en esta cadena de éxito que ha convertido al Carmenere en un símbolo de desarrollo y adaptación para Chile”. Así lo señaló el experto europeo.
Para celebrar este hito, Viña Carmen organizó un evento especial que incluyó el estreno del documental «The Lost Grape», obra producida por el autor estadounidense Garret Sutton. La película narra la fascinante historia del redescubrimiento y su impacto en la viticultura chilena.
“Cuando escuchamos sobre esta fascinante historia de una variedad de uva que estuvo perdida durante más de 120 años, redescubierta en Chile y devuelta al mundo con tanto éxito, no dudamos en hacer un documental. The Lost Grape es una película para todo tipo de público, amantes del vino y más. Es una inspiradora historia de resiliencia, determinación y triunfo, donde el espíritu humano se eleva para transformar problemas en oportunidades”, comentó Sutton.
Desafíos superados
Aunque el redescubrimiento fue un logro único, el desafío real fue posicionar la cepa como una variedad distintiva dentro de la industria vitivinícola chilena. En ese momento, Chile tuvo que enfrentar un reto comercial importante: reconocer que el Merlot, que se exportaba en grandes cantidades, no era tal. Este descubrimiento generó controversia, pero viña Carmen lideró el cambio que revolucionó la industria del vino en Chile, posicionando al Carmenere en un mercado internacional acostumbrado a cepas más tradicionales como el Cabernet Sauvignon.
«El Carmenere es una parte integral de nuestra identidad vitivinícola y celebrar sus 30 años de redescubrimiento es un honor», comentó Cyrille Rogeau, presidente de Viña Carmen. «Este evento no sólo honra a aquellos que hicieron posible este hallazgo, sino que también celebra la resiliencia y la innovación de nuestra industria», agregó.
Hoy en día, Chile es el principal productor mundial de esta cepa y es reconocido por elaborar vinos con un carácter único. Ana María Cumsille, enóloga jefe de viña Carmen, destaca: “El Carmenere se ha convertido en un símbolo de la viticultura chilena. Representa la capacidad de nuestro país para producir vinos distintivos y excepcionales a nivel global. El carácter especial que hemos logrado imprimirle, junto con las condiciones únicas de nuestro terroir, enriquecen nuestra oferta vitivinícola y consolidan a Chile como un país versátil y dinámico en la industria del vino”.
El redescubrimiento de esta cepa tinta ha posicionado a Chile como uno de los principales productores de esta variedad. También generó un renacimiento en la industria del vino, destacando la importancia de la diversidad y la preservación de las cepas tradicionales.
Descuentos imperdibles
La cadena de tiendas La Vinoteca este año celebra sus 30 años, los mismos que el redescubrimiento del Carmenere en Chile. Para conmemorar ambas fechas, la firma ofrecerá un 35% de descuento en vinos Carmenere entre el lunes 25 y el miércoles 27 de noviembre, tanto en sus tiendas físicas como en su sitio web.
En ese sentido, los ejemplares de esta cepa que participarán en la promoción son Casas Patronales Leal, VIK A, Requingua Rincón de los Vientos, Koyle Royale y Von Siebenthal San Valentino. Se suman Santa Ema Cuarto Elemento, Morandé Vitis Única, Perez Cruz Limited Edition, Casas del Bosque Gran Reserva, Matetic Corralillo y Chocalan Origen Gran Reserva.
El gerente comercial de La Vinoteca, Pablo Awad, señaló que “estamos muy contentos de celebrar 30 años. Y este aniversario no solo marca un hito en nuestra historia, sino que también refuerza nuestro compromiso con impulsar la cultura del vino en el país”.
Marca clásica
Otro ejemplo de esta cepa se puede ver en las propuestas de la clásica marca de Concha y Toro: Casillero del Diablo. Esta variedad se puede encontrar en sus tres líneas: Reserva, Reserva Especial y Reserva Privada.
Marcio Ramírez, enólogo de Casillero del Diablo, explica cada vino y recomienda algunos maridajes.
El Reserva Clásico es un vino que proviene del Valle Central, principalmente del Valle del Rapel. Posee un color rojo intenso y profundo, destacando por una suavidad en boca, con taninos redondos. En esta época es ideal para acompañar con porotos granados y humitas con ensalada chilena.
El Reserva Especial proviene de la zona de Peumo, en el Valle del Rapel, cercano al río Rapel, zona que posee suelos con mayor presencia de arena y granito. En este lugar, la uva madure antes, entregando al vino toques a fruta roja, confitura, notas balsámicas con un tanino más presente. Es ideal para acompañar con brochetas de carne asada con pimiento y cebolla asada o rollos de berenjena con queso crema a la parrilla.
El Reserva Privada es un vino que proviene del sector de Peumo en el Valle del Rapel, más alejado del río Rapel, lugar con suelos profundos ricos en arcilla, que hace que la uva madure lentamente. Este Carmenere posee bastante presencia de frutos negros, toques de pimienta negra. En boca se siente un tanino delicado y elegante dando paso a un largo final. Es ideal para acompañar con entrañas de vacuno y provoleta.
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