Visita a viña Santa Mónica
El sábado 5 de julio, el enoturismo chileno suma un hito significativo: la legendaria Viña Santa Mónica abrirá por primera vez sus puertas al público. En la oportunidad ofrecerá una experiencia única que combina historia, arte y vinos con más de dos décadas de guarda.
Ubicada en el valle de Cachapoal, a la altura del kilómetro 5 del camino a Doñihue, la viña Santa Mónica se fundó en 1976 por el pionero enólogo Emilio de Solminihac. Se concebió con una visión clara: demostrar que en Chile sí es posible elaborar vinos de guarda.
Inspirado por su formación en Burdeos junto a figuras como Émile Peynaud, su fundador seleccionó cuidadosamente cepas como Cabernet Sauvignon, Merlot, Semillón y Riesling. Con ellas elaboró vinos pensados para descorcharse tras 20 o, incluso, 30 años.
La apertura de este sábado, desde las 11:00 horas, incluirá recorridos por la bodega histórica y la casa patronal, así como degustaciones de vinos con más de 20 años de guarda. También habrá música en vivo y expresiones artísticas, además de conversaciones con las nuevas generaciones de la familia Solminihac.
La actividad requiere inscripción previa a través del Instagram oficial de la viña Santa Mónica, y promete ser una inmersión en la historia viva del vino chileno.