viernes, marzo 29, 2024
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Cooperativa campesina superó 1,5 millones de litros vinificados

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Con una producción que llegó a un millón 700 mil litros, la Cooperativa Cerro Negro de Quillón, Coovicen, festejó 7 años de vida como cooperativa. Y los 15 años desde que se creó como comité campesino. Fue la respuesta que encontraron como resultado de la crisis de los precios de la uva y con la voluntad de salir adelante agregando valor a la uva a través de la vinificación.

El primer año solo comercializaron uvas tradicionales producidas por sus socios y otros viñateros de la comuna. El año 2019 comenzaron la producción de vinos de manera asociativa y, con la gestión del directorio, comercializaron su producción a empresas viñateras de la zona central. Todo este proceso ocurrió mientras iban aumentando paulatinamente la vinificación.

El tiempo y el trabajo le dieron la razón a la cooperativa. Desde una primera vinificación de 60 mil litros, hoy apuestan a superar la barrera de los dos millones de litros para la vendimia 2023. Y a diversificar la producción de vino a granel para el mercado interno y exportación, vinos embotellados y espumantes. Para ello cuentan con el apoyo permanente de Indap, a través de recursos para la vinificación y la inclusión en el Programa de Asociatividad Económica.

“Al principio no estaba muy convencida de participar de la cooperativa, pero me decidí y fue una buena decisión”, contó Graciela Iturra. Ella es una de las 4 viñateras que participan en Coovicen. “Hemos crecido mucho, con mejores precios cada vez y ha sido la cooperativa la que ha ido empujando para que los precios de nuestra uva sean mejores. Ya no dependemos de los intermediarios que venían a comprar la uva”, comentó.

Para el presidente de Coovicen, Eduardo Carrasco, «nuestra meta es crecer haciendo vino. Somos partidarios de seguir agregando valor a la materia prima, porque vender la uva no es el mejor escenario para el agricultor”, indicó. Agregó que otra de las metas es seguir modernizándose y avanzar hacia la cosecha mecanizada.

“Nunca nos quejamos, ni dijimos que el precio estaba malo, sin hacer nada”, recuerda uno de los directores de Coovicen, Juan Carlos Lagos. “Y demostramos que se puede, que es posible crecer, las uvas del Itata son un buen negocio y lo estamos demostrando, con trabajo duro y sacrificio. Pero lo logramos”.


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